
El comienzo con “Juegas con fuego” marca ya la diferencia con respecto a trabajos anteriores con su ambiente pop rock y una clara inclinación hacia un costado cancionero que se acrecienta en “Una mañana distinta” en donde dominan las acústicas. En “Noche bizarra”, con predominio de los vientos, y en “Aunque no duermas”, Mizrahi saca a relucir su rock and roll mientras “Vendedor de humo” llama la atención con sus guitarras a lo U2.
“Última oportunidad” es una bonita balada de amor, con una de las mejores letras del disco y donde la voz de Diego rinde óptimamente, teniendo en cuenta que al ser su primera experiencia como cantante aún todavía le faltan algunos ajustes para llegar a un gran nivel en ese aspecto. “Un tipo básico” presenta un riff que será del agrado de muchos guitarristas y “Para aquellos que están solos” muestra nuevamente el costado sensible del artista. En el cierre, “I can´t falling in love”, un viejo clásico popularizado por Elvis Presley, y “Jet lag”, ambas instrumentales, nos hacen acordar que este es el álbum de un guitarrista y allí Mizrahi se despacha con su ya conocido virtuosismo.
Básico nos presenta a un Diego Mizrahi abocado al formato canción (ya sea rock, balada o más acústico) y no tanto a demostrar su virtuosismo, que por cierto está presente pero en menor medida que en trabajos anteriores. Todo ello hace que este álbum pueda ser apreciado por un público más heterogéneo y no solamente por músicos.



El disco golpea de entrada con las violas potentes, bien al frente de “Verbo” y en “Nuevo mar” muestran una faceta más amable y radial al igual que en el buen corte de difusión “Luz sin fin”. “Perfume eléctrico” y “Kamikaze” dan cuenta del ida y vuelta entre lo pesado y lo tranquilo que se da a través de todo el álbum, algo característico en las producciones de Pichu Serniotti ya desde sus épocas de Cabezones. La parte vocal también muestra un interesante cuidado tal como se escucha en la constante interacción entre Federico Beber y Julio Vitulano.Por su parte, el arte del álbum gira en al título del mismo y las fotos muestran distintos peces que habitan en las profundidades marinas mezclados con imágenes de los músicos en plena grabación. 