Todo de nuevo
Las Trampas de Lily transitan el camino de la canción folk-rock en su tercer disco.
Nacido hace casi diez años en la ciudad de Río Gallegos, provincia de Santa Cruz, Las Trampas de Lily es un grupo que se asienta en las bases del rock y desde allí se deja llevar hacia distintos matices que pueden incluir el folk, la balada y hasta el punk entre otros. Con dos discos bajo el brazo (La calle que brilla de 2005 y Escucho las voces de 2007), este año el cuarteto integrado por Miguel Jancich en guitarra y voz, Duffy D en bajo, Marcelo Merlino en teclados y Fernando Jasen en batería editó Todo de Nuevo, producido artísticamente por Ulises Butrón.
Estas diez nuevas composiciones se reparten en apenas media hora como si hubiera una urgencia por escupir sentimientos casi sin descanso. Es que las letras retratan historias de amor desafortunadas, casi siempre en primera persona, que buscan la identificación en el oyente. Por su parte, la música ambienta esas historias con sonidos folk en donde las guitarras acústicas y los teclados y hasta las circunstanciales armónicas adquieren un papel primordial. Las guitarras eléctricas, procesadas en varios casos por distintos efectos, le dan a los temas el infaltable toque de energía.
“A veces no alcanza”, “La fiebre” y “Todo de nuevo” son las mejores representantes del disco, en donde se reúnen los distintos matices pero sin dejar de lado el costado más rockero del grupo. En el tema que cierra el álbum, “La cadena”, los de Río Gallegos se ponen aún más intimistas y reflexionan sobre la rutina en la que vivimos en una balada interpretada por el piano y la voz.
Estas diez nuevas composiciones se reparten en apenas media hora como si hubiera una urgencia por escupir sentimientos casi sin descanso. Es que las letras retratan historias de amor desafortunadas, casi siempre en primera persona, que buscan la identificación en el oyente. Por su parte, la música ambienta esas historias con sonidos folk en donde las guitarras acústicas y los teclados y hasta las circunstanciales armónicas adquieren un papel primordial. Las guitarras eléctricas, procesadas en varios casos por distintos efectos, le dan a los temas el infaltable toque de energía.
“A veces no alcanza”, “La fiebre” y “Todo de nuevo” son las mejores representantes del disco, en donde se reúnen los distintos matices pero sin dejar de lado el costado más rockero del grupo. En el tema que cierra el álbum, “La cadena”, los de Río Gallegos se ponen aún más intimistas y reflexionan sobre la rutina en la que vivimos en una balada interpretada por el piano y la voz.
En Todo de nuevo, su tercer trabajo discográfico, Las Trampas de Lily expresan melancolía y desamor y lo conjugan con toques folk que también se combinan con guitarras rockeras.
Christian Alliana para www.elbondi.com
1 comentario:
muy buena critica de este exelente disco.
felicitaciones Christian.
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